DEJA VUS, PASAMONTAÑAS Y MARMOTAS

Al nihilismo satisfecho de los poderosos corresponde el nihilismo ambiguo de los artistas rebeldes. El destino del rebelde era la derrota o la sumisión. La primera es casi imposible ahora: los poderes sociales aceptan todas las rebeliones, no sin antes cortarles las uñas y las garras. No creo que la rebeldía sea el valor central del arte, pero me apena la simulación o la utilización astuta de uno de los impulsos más generosos del hombre

Octavio Paz

En Chiapas (sí, otra vez Chiapas) la historia del poder es un plan estratégico que garantiza el crecimiento de sectores como el político, ganadero, empresarial y periodístico. Estos consorcios, autogeneradores de problemas y soluciones, han reducido a regiones urbanas la pobrísima estructura financiera, marginando a los más pobres a depender de los subsidios y no de un presupuesto propio. Este aforo trágico de conformidad con lo establecido jamás ha cuestionado las circunstancias y modos con las que se ha saqueado el estado (pequeña patria le dicen los poetas), al contrario, desde las mismas universidades la conciencia es un compendio de tentaciones mercantiles para abordar –jamás como antítesis- las rutas trazadas por el sentido tradicional de la historia.

La libertad de expresión en Chiapas no sólo cuida, también educa al gobernador, que es quien paga sus servicios; por eso la conformación del Chiapas Solidario es una compensación con las mismas distinciones y privilegios hacia los que bajo contrato rescatan  la dignidad de su historia para compartirla entre ellos como importantísimo factor de estabilidad, dignidad y desarrollo. No olvidemos el Estado de Derecho, ese juez y parte que elogia lo bella que es la democracia y se encarga de que las ganancias no disminuyan; para ello las inserciones de nombres en puntos clave y la creación de nuevas reglas encaminadas a acostumbrarnos, de ahora en adelante, a la violencia y el narcotráfico.

La desidia y la indigestión de una revuelta que subrayó únicamente el culto a la personalidad nos hicieron caminar y solicitar empleo convencidos de una victoria segura, eso sí, repitiendo habilidades y horizontes hipotecados de por vida en las ocho columnas.

Luis Daniel Pulido

Es portero, poeta, comediante y buen amigo. Sus textos han sido publicados en fanzines, pero también en algunas revistas de renombre como Tierra Adentro. El anterior texto se reproduce bajo autorización de su autor.